Hotelería: del otro lado del mostrador

Son muchas las cosas, que desde mis 14 años de experiencia en Hotelería, puedo contar.

Al frente de una recepción y en el back de la misma, uno puede escuchar infinidad de historias con todos los matices, enrosques, idas y vueltas que a uno se le puede ocurrir. Más de un guionista de cine o tv, desearía tener acceso al caudal de disparadores con el que nos encontramos nosotros, para escribir cualquier ficción.

Más allá de todo este universo de historias con las que convivimos día a día; también nos encontramos con una lista de frases que se repiten una y otra vez, muchas veces pareciera que infinitamente, en una especie de “Eterno Retorno “ Niesztchiano.

Como internet es servicio, intentaremos evacuar estas dudas de una vez y para siempre, aunque la experiencia nos demuestre que “todo vuelve”…

 

Fecha de Salida:

Es uno de los primeros y más importantes datos a la hora de realizar una reserva. Y aunque parezca una obviedad, muchas veces no lo es: la fecha de out o de salida, es la fecha en que uno se va del hotel y dura hasta el horario de check out que puede ser entre las 10 y las 12hs en general. Esto quiere decir, que si uno reserva del 10 al 14, debe retirarse de la habitación el 14 a la mañana; nunca se refiere al 14 inclusive.
Puede parecer extraño, pero nos hemos encontrado (y sobrevivido) a un 25% del hotel  sobrevendido porque un grupo de señores dio por sentado que era hasta tal día inclusive; pero… para qué arriesgarse a quedarse durmiendo dentro de un auto, no?

Early check in:

Este término, es quizás poco conocido, y sin embargo, muy habitual. Se refiere a ingresar a la habitación horas antes del horario de check in. Para comenzar, aclaremos que el horario de check in está previsto en base al horario de salida estipulado + el tiempo que le lleva a la gente de Housekeeping limpiar y entregar la habitación. No se trata de un horario al azar y en épocas de gran demanda no podemos hacer mucho al respecto. El early check in es un servicio pago. Se abona la noche anterior si uno pretende ingresar a la habitación si o si en el horario de llegada, cualquiera sea. Hay hoteles más exigentes y otros más flexibles pero lo que es común para todos, es que si el hotel está lleno difícilmente pueda otorgarse este beneficio; porque implicaría sacar de la habitación a un pasajero que por contratación tiene derecho a permanecer hasta el horario de check out.

Late check out:

Esto es lo opuesto al punto anterior. El late check out es permanecer en la habitación más tarde del horario previsto de salida. En casi todos los hoteles es un beneficio pago (lo general es el 50% del valor de una noche); en algunos puede otorgarse sin cargo como cortesía del hotel. En este caso, es importante entender que es una cortesía y no una obligación del hotel y que, también, depende de la ocupación que haya en el hotel. Por lo que, lo correcto es preguntar si puede otorgarse este beneficio y no darlo por sentado e irse del hotel sin consultarlo con el recepcionista de turno.

A la hora de facturar:

es muy común, especialmente con pasajeros que viajan por negocios, que nos pidan a la hora de emitir la factura correspondiente; que algunos consumos de la estadía figuren bajo otros nombres. Entendemos, que no pueden pasar como viáticos consumos como masajes o whisky del frigobar; pero también deberían saber que la forma en que figura en la factura el consumo depende de cosas como la configuración de la impresora fiscal. No siempre es posible (yo diría que nunca) cambiar los nombres de “lo que sale en la factura”. Mi recomendación es… páguelo aparte, señor, si se toma un masaje que no lo pague la empresa.

“Cómo puede ser que no haya habitación?”:

esta es quizás la pregunta más delicada, por llamarla de algún modo. Para los desprevenidos, un hotel es un negocio que vende habitaciones. Por ende, el objetivo es venderlas todas. Y si, contra todos los pronósticos a veces lo hacemos. Con lo cual, si desde la oficina de reservas dicen “no tenemos más lugar” es cierto, no es que no queremos alojarlo. De esta preguntan derivan tantas otras preguntas molestas como: “no está vacía X ciudad a esta altura del año?”; “cómo no guardan un porcentaje de habitaciones por si los clientes quieren viajar?” o “nada, nada? Ni una chiquita?”

 

 

Por @merycronopia

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