Historia de los 48 abrazos pendientes

Hola,

Me llamo Irene Mónica Ocampo, y tengo 54 años.

Hace 48 años que no abrazo a mi prima Carmen Midolo. Yo tenía 6 años cuando ella, mi prima María Cristina  y mi tía Rosa, se iban en el Eugenio C  a Italia.

Un lugar que estaba lejos, pero que tenia la misma forma que la Santa Fe natal de ellas. Aquí Vivian en Constitución, en la calle Salta al 1200.

Allí mi tía Rosa Giménez, hermana mayor de mi mama ,vivía con Joaquín Midolo y sus hijas. Ella tenía clientas en la peluquería y el hacia masajes, pedicura  y tenía un aparato que al día de hoy no se que era…pero las señoras salían felices y volvían siempre.

Ellos eran mis padrinos, él llego a Argentina en 1946, venia escapando de la guerra. Allí había perdido su familia, mujer e hijos.

Era nacido en Sicilia, en Siracusa en 1915, y en 1967, le llega una notificación de que había un hijo con vida, mientras que ya por el tiempo transcurrido, el resto de la familia, era declarada oficialmente como fallecidos.

Con esta notificación partió en el ENRICO C y una vez llegado, reencontrado con su hijo, y otros familiares, manda un telegrama, donde le pide a mi tía que venda todas las instalaciones, compre los pasajes y se reúnan en Roma.

Que emoción desde mis seis años!

Que tragedia para mis primas con 18 y 16 recién cumplidos! Plena adolescencia!!

Pero el amor fue el que gano y allá fueron…ellas se querían convencer de que se iban de una bota (Santa Fe) a otra bota (Italia).

Conocí Italia por todas las tarjetas postales que nos enviaban, él con su Fiat 5oo les mostró toda su tierra, de norte a sur, de este a oeste. Y ellas me mandaban coloridas “cartolinas” de cada lugar que conocían…21 días, con suerte, tardaban en llegar.

Llegaron los novios, formaron su familia, fue cuando mi tío Midolo, le propuso matrimonio a mi tía  Rosa.

Toda la vida juntos , un amor fuerte como una roca y la vida , que quiso que seis meses después de casarse, con poco tiempo…dos quizás tres años de volver a su querida Italia, Midolo muere de una hepatitis c fulminante (no había transplantes en ese entonces).

Allá quedaron, mi tía, mi prima Carmen ya casada con Mario, y mi prima Cristina con Nanino.

Mamá pudo ir hace 15 años a ver a sus sobrinas, mi tía  vino tres veces a vernos. Siempre contaba que cuando se vieron en el aeropuerto se dieron 33 abrazos cada una… uno por cada año de separación. Hace poco viajó una prima  y yo le envié un abrazo y un beso por cada año que no nos vemos. A Cristina no puedo abrazarla ya que se fue muy rápido de este plano terrenal, pero me encantaría abrazar a sus hijos y sus nietos.

Gracias a la tecnología y a que soy muy cargosa, primero usábamos la conexión con la compu de Virgilio, el hijo. Pero logré convencerla que compre un celu y gracias a eso hablamos por wasap todos los días, mensajes de voz, fotos, videos; de mi tía, que ya está en su mundo pero todavía me reconoce, de los perros, los gatos y los nietos!

Esta es la historia ..siempre sueño en los abrazos ,uno por cada año, con ir a Ostia a la playa y con hacerle cosquillas a Mario para que se ría , cuando nos saquen una foto.

Pero la película que tengo en mente es la de los abrazos… uno por cada año.

 

Por Irene Mónica Ocampo

 

2 comentarios

  1. Bella historia. Hermoso anhelo. Creo que fue Walt Disney que dijo que si algo podes soñarlo, podes hacerlo, así que seguramente te vas a poder desquitar dando abrazos en Italia.

  2. Nunca es tarde Irene, mi abuelo, como conté acá, espero largos 65 años, pero el momento llegó y fue inolvidable para todos!
    Lo importante es no dejar de soñar con ese abrazo.. esos abrazos!!!

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